domingo, 22 de mayo de 2011

Y sin embargo... sigues en mi mente

Ella le observa sentado en un banco hablando con un amigo, mientras le espera sentada en el banco de al lado junto con dos amigos.
- ¿Sabéis algo de la otra?- dice uno de sus amigos - Por lo que sé, ha vuelvo a tontear con ella....
Su mundo se paró por un instante y se odió a sí misma por tener esos sentimientos tan fuertes por él, era una lucha en la que debía ganar el razonamiento, pero el amor tenía mucha más fuerza y no se iba a rendir fácilmente. Ya no puede dejarlo pasar, él no se va a volver a ir lejos. Ha vuelto para quedarse, y ella tiene que afrontar lo que siente por él, ya no puede dejar sus sentimientos a un lado como acostumbraba a hacer cuando él no estaba...
¿Cómo va a culparle a él por no quererla? Sería algo bastante egoísta por su parte reprocharle eso, de todas formas, no le queda otra que reunir el valor suficiente para hablar con él... si es que puede....